Salvador Moreno González nació en Unión de Tula, Jalisco, en 1962. Cuando contaba con cinco años, su familia se trasladó a San Pedro Tlaquepaque. En el barrio de San Miguel pasó su infancia, en un ambiente sano y pintoresco. Desde muy temprana edad comenzó a trabajar en una ladrillera y, posteriormente, empezó a dedicarse al comercio: ayudaba a una de sus hermanas mayores, Irene, a vender artesanías en su puesto en el antiguo mercado de San Pedro. Así comenzó una vida productiva que lo ha llevado a emprender varios negocios familiares. Al terminar la secundaria, Salvador estudió la carrera de técnico en electrónica. A los 19 años se casó con Verónica Rivera, con quien procreó a sus tres hijos: Salvador, Dámaris y Mari. Su familia es el pilar en el que gira toda su existencia. Cumplidos los 56 años retomó los estudios y empezó la preparatoria, que ya concluyó, con la idea de poder lograr un anhelo: estudiar psicología. En la industria restaurantera ha emprendido en la preparación de pescados y mariscos, experiencia que le ha permitido conocer -con la cercanía del trato cotidiano- las raíces de las problemáticas de las familias. Ha tenido asesoramientos y talleres de desarrollo espiritual y humano y ha participado en encuentros con Cristo y cursillos de Cristiandad, transmitiendo el mensaje de vida en centros penitenciarios. En la actualidad ha creado un centro para la atención integral de la salud llamado La Sagrada Familia, con la intención de ayudar a su comunidad, desde la raíz, en busca de la salud física, mental y espiritual.